domingo, 14 de marzo de 2010

Collinder 69 - Cúmulo abierto en Orion

La noche del 13 de marzo de 2010 me había planificado la observación de unas cuantas galaxias en la zona de Leo, Coma Berenices y Virgo, pero la humedad en el ambiente, un poco de neblina y la contaminación lumínica de mi lugar de observación habitual me impidieron distinguir nada que se pareciera a una galaxia.

En vista del éxito, decidí reconducir la noche e ir a observar un cúmulo abierto que tenía anotado desde hace tiempo, pero que no había tenido ocasión de dedicarme a él con tranquilidad. Este cúmulo no era otro que Collinder 69 (Cr 69) en la constelación de Orion.

Es muy fácil de localizar, ya que su componente principal es Meissa (Lambda Orionis), que representa la “Cabeza” de Orion.

Esta es una carta celeste que he hecho para facilitar su ubicación:

La disposición de las estrellas más brillantes de Cr 69 es muy peculiar, formando un interesante asterismo que abarca un poco más de 1º. Pero no es sólo un asterismo, sino que es también un cúmulo abierto formado por una veintena de estrellas que se encuentran a unos 1.600 años luz de distancia.

La gracia de Cr 69 radica en que es un objeto asequible a unos prismáticos de 10x50, pero que a medida que se van añadiendo aumentos va descubriendo unos cuantos tesoros escondidos.

La noche en cuestión, decidí empezar con mis prismáticos 10x50. Facilísimo de localizar, apunté directamente a Meissa y apareció ante mis ojos de forma inmediata el cúmulo.

Son unas ocho estrellas brillantes, acompañadas por otras de más débiles que se distinguirán más o menos, dependiendo de la noche y de la contaminación lumínica que se padezca.

Lo primero que me pasa por la cabeza es que me sugiere una cinta serpenteante de estrellas. Al cabo de unos instantes, me recuerda un colador chino. Y cuando la palabra “cucharón” me viene a la mente... decido con una sonrisa en la boca aparcar los prismáticos y coger el telescopio.

Pongo los mínimos aumentos que me permite mi Nexstar 5i (31,25x) y el campo de visión se reduce considerablemente. Aunque bien es cierto que el cúmulo mantiene todo su encanto. Este es el dibujo que hice:

De las ocho estrellas brillantes que veía con los prismáticos, he pasado a ver cuatro. Pero éstas ofrecen una visión peculiar y atractiva.

En un primer momento, destacan las cuatro estrellas más brillantes que forman una L. Pero rápidamente, llaman la atención tres estrellas más débiles (alrededor de la magnitud 7ª) que se encuentran entre Meissa y Phi1 Orionis en fila india y equidistantes entre sí.

En cierta manera, me recuerda el asterismo del “Cinturón de Orión (Las Tres Marías)”, pero en miniatura.

También es curioso observar, en la zona central y superior derecha del dibujo, un grupo de estrellas más débiles (mg. 8-9) que ofrecen unas formas romboidales muy delicadas...

He empezado con 10x. He continuado con 31,25x... y, a continuación, es necesario poner más aumentos para seguir descubriendo los tesoros prometidos.

Me centro en la estrella más brillante del grupo: Meissa. También conocida como Lambda Orionis... STF738... GUI9... Vaya, que no está sola. Al contrario, estamos hablando de un sistema de cinco componentes:

05351+0956STF 738AB AP: 44 / Sep. 4.1 / Mag. 3.51-5.45
05351+0956STF 738AC AP: 185 / Sep. 28.7 / Mag. 3.51-10.72
05351+0956STF 738AD AP: 272 / Sep. 78.0 / Mag. 3.51-9.63
05351+0956GUI 9AE AP: 279 / Sep. 150.4 / Mag. 3.51-9.22

Lamentablemente, esta noche, con mi telescopio y a 125x, tan sólo puedo ver las componentes A, B, D y E.

Este es el dibujo que hice con el Photoshop:

La principal la veo con un tono amarillo/blancuzco, mientras que la componente B la veo azulada/blancuzca. Las otras dos componentes restantes, la E claramente más brillante que la D, se muestran como dos puntitos de luz, tal vez azul oscuro.

De todas maneras, no hay que hacer demasiado caso a mis apreciaciones cromáticas, ya que curiosamente, pocos observadores se ponen de acuerdo a la hora de definir los colores que ven en las diferentes componentes. Un aliciente más para echarle el ojo a este sistema.

Y a partir de aquí, ya no llego con mi telescopio. Es necesario uno de mayor abertura para afrontar un verdadero reto: desdoblar la STT111. (En el dibujo a 31,25x, en la parte superior izquierda).

La separación es de 2,8", muy pequeña para una principal que brilla con magnitud 5,6 y una secundaria de 9,68. El ángulo de posición (para ayudar a la localización de B) es de 351º. Lo intento a 250x, pero es inútil: demasiada diferencia de brillo para una separación tan pequeña.

Estuve casi una hora observando Cr 69 y sus tesoros escondidos... por lo que, para terminar un poco más relajado después de forzar tantos aumentos, volví a coger los prismáticos 10x50 y di un último vistazo a Collinder 69, un rinconcito de cielo con abundantes atractivos.

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La noche del 14 de marzo de 2010, todavía con el buen recuerdo de la observación de la noche anterior, me atreví a sacar la cámara Nikon D70S y montarla junto a un reductor de focal f6,3 a foco primario de mi Nexstar 5i de 127mm para intentar inmortalizar Cr 69 fotográficamente.

Esto es lo que me ha quedado (Volteada horizontalmente para que quede tal como lo veo a través de mi SC):

2 comentarios:

  1. Hola ,Almach...
    vengo directamente del balcón...¡qué frío!
    He estado observando Collinder 69...por primera vez!. Orión tiene tantos tesoros que te pierdes...
    Antes había estado leyendo atentamente tu observación. Me gusta lo que cuentas y cómo lo
    haces (te sigo en la AAHubble)
    Me he dado un paseo por ahí con un refractor de 76 mm desde el centro de mi ciudad (Zaragoza).El seeing no era bueno.Con mi refractor de focal corta y un panoptic 24 ,tengo casi 3º y he podido disfrutar del conjunto,que muy bien describes.
    Luego he metido aumentos (130x) y me ha gustado mucho desdoblar lambda Ori (Meissa).
    No he apreciado bien los colores porque la noche era mala y la abertura del teles hacía que algunas estrellas fueran demasiado débiles.
    Una visita recomendable pues este collinder 69
    tanto en ancho campo como en el detalle...
    Gracias por compartir tus experiencias de una forma tan amena y trabajada
    un saludo.
    Antonio

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  2. Hola Antonio,

    Gracias por el comentario, y felicidades por la observación. Con el frío que hace estos días sacar el telescopio para observar es de valientes :)

    Lo mejor de todo es poder compartir y comparar las observaciones de uno con la de otros aficionados y disfrutar en primera persona de lo que podemos ver con nuestros telescopios.

    Saludos.

    Oscar

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